Informe especial: retorno del fenómeno La Niña – Impacto sobre Uruguay y perspectivas para la próxima zafra
/
/
Informe especial: retorno del fenómeno La Niña – Impacto sobre Uruguay y perspectivas para la próxima zafra

Las últimas mediciones de las boyas oceánicas del Pacífico central ecuatorial confirman que el fenómeno de “La Niña” ha regresado a la región. Este cambio marca un punto de inflexión en las condiciones climáticas regionales y puede tener implicancias importantes para el agro uruguayo durante los próximos meses.

Consecuencias esperadas en Uruguay

En nuestra región, el retorno de La Niña suele asociarse a precipitaciones por debajo de lo normal y a una mayor irregularidad en su distribución.

Se espera que entre noviembre y enero las lluvias sufran un deterioro en frecuencia e intensidad. Probablemente llueva menos de lo habitual. Esto no implica necesariamente un escenario crítico: si las lluvias se concentran en momentos clave para los cultivos —como ocurrió el año pasado—, los rendimientos podrían mantenerse en niveles aceptables. Sin embargo, es esperable una alta variabilidad espacial: puede llover 100 mm en un punto y nada a pocos kilómetros, fenómeno típico de las tormentas convectivas de verano.

Otro rasgo clásico del inicio de La Niña es la mayor frecuencia de irrupciones de aire frío.

Ya se observó un fin de semana con temperaturas inusualmente bajas, y se espera una nueva entrada de aire frío para el 27 y 28 de octubre, con otra posible hacia comienzos de noviembre.

osteriormente, el patrón suele invertirse: tras unos 10–15 días, se pasa bruscamente de aire frío a condiciones más cálidas que lo normal, favoreciendo olas de calor en pleno desarrollo del verano.

Perspectivas para la zafra

El panorama apunta a una zafra desafiante en cuanto a disponibilidad y distribución de lluvias, pero no necesariamente adversa.

La clave estará en monitorear los períodos críticos de los cultivos, aprovechar al máximo las precipitaciones disponibles y mantener una gestión prudente de la humedad en los suelos.

En resumen

  • La Niña se instaló oficialmente con anomalías térmicas inferiores a -0,5 °C.
  • Lluvias escasas y mal distribuidas se prevén entre noviembre y enero.
  • Irrupciones de aire frío seguidas de olas de calor marcarán la transición a verano.
  • La variabilidad espacial y temporal será el rasgo dominante del clima.

José María Rodríguez Pirez

Asesor meteorológico

 

¿Necesita información técnica?

Start typing and press Enter to search

Shopping Cart

No products in the cart.